NUEVA YORK – Perdiendo 6-1 en el tercer episodio del Juego 3 de la Serie Divisional de la Liga Americana el martes por la noche – y al borde de la eliminación en las hostilidades al mejor de cinco tras perder los primeros dos choques en Toronto durante el fin de semana – los Yankees daban mucho motivo para dudar de ellos.

Sin embargo, los Bombarderos del Bronx le hicieron honor a ese apodo y con la ayuda de una pobre defensa de los Azulejos, un Shane Bieber nada afinado y un bullpen de Toronto bien deficiente, anotaron ocho carreras sin respuestas del equipo canadiense en una victoria por 9-6. Ahora los Yankees tienen vida, pero aún se encuentran abajo en la serie 1-2 con el Juego 4 programado para el miércoles en el Bronx.

Por supuesto, el batazo más grande de la noche fue el jonrón de tres carreras de Aaron Judge que empató el partido 6-6 en la cuarta entrada. Frente al relevista Louis Varland, “El Juez” agarró una recta bien adentro – 1.2 pies adentro y a 99.7 millas por hora, un récord para un batazo que haya resultado en cuadrangular ante esa clase de lanzamiento – y envió la bola hasta el poste del jardín izquierdo.

En ese momento, estalló el Yankee Stadium y los Yankees ya iban rumbo a su primer triunfo de esta serie, y su tercero en estos playoffs estando contra la pared.

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“Es algo grande”, dijo Judge, quien ahora ha disparado seis vuelacercas de por vida en juegos en que los Yankees enfrentaban la eliminación, empatando al Salón de la Fama dominicano David Ortiz por la mayor cantidad en la historia de Grandes Ligas. “Simplemente trataba de hacer mi trabajo, lo que vengo tratando de hacer todo el año. No tratar de hacer demasiado.

“Es lo único que puedes hacer, sobre todo ante nuestros fanáticos. Ellos estaban un poco ansiosos cuando perdíamos por 6-1, pero estallaron cuando empatamos y luego tomamos la ventaja”.

Definitivamente, los 47,399 espectadores anunciados en el Yankee Stadium se hicieron sentir. Y cuando Jazz Chisholm Jr. le dio a Nueva York la ventaja definitiva con un jonrón en el quinto acto frente a Varland, el ruido del público se encendió una vez más y continuó hasta el último pitcheo del partido.

“Si estoy en medio del orden al bate, tengo que hallar la manera de embasarme”, dijo Judge, quien batea de 22-11 (.500) en esta postemporada, con dos dobles, seis remolques y el cuadrangular del martes, su primero de estos playoffs y su número 17 de por vida en postemporada.

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El batazo de vuelta entera de Judge el martes no sólo prendió al público en el Yankee Stadium, sino también el dugout del equipo de Nueva York.

“Pensé que fui yo que le di”, dijo con una sonrisa el utility dominicano Amed Rosario, quien bateo de 2-1 con una anotada al entrar al juego en sustitución del tercera base Ryan McMahon. “Yo vi esa bola y yo la jalé. Dije, ‘Tiene que ser buena’, y la jalé. Se sintió bastante bien. Me siento bastante contento por él, porque al final del día, entre todo, dio el batazo importante.

“Te puedo decir que los muchachos, a pesar de que el juego estaba 6-1, en esa situación ellos nunca bajaron. Siempre se mantuvieron positivos. Fueron a jugar el juego y tratando de descontar… una, una. Al final, los bates estuvieron ahí, que es lo que se necesitaba”.

El manager de los Yankees, Aaron Boone, ha elogiado la garra de los Yankees todo el tiempo. El martes, hicieron quedar bien a su dirigente.

“Obviamente, algo grande”, expresó Boone acerca de la reacción de sus pupilos el martes en el Juego 3. “Hay que continuar luchando y compitiendo cuando las cosas no pintan bien. Hubo muchos turnos de calidad para remontar. Hubo jugadas importantes a la defensa y buen pitcheo del bullpen.

“Es béisbol de playoffs. Hay que seguir dándole. Fue una gran victoria en equipo. Es divertido ver a tantos muchachos en roles importantes, de alguna manera, para ganar”.

El miércoles en el Juego 4, los Yankees tratarán de igualar la serie y obligar un decisivo quinto partido en Toronto el viernes. Nueva York se irá en el montículo con el novato Cam Schlittler, quien dominó por completo a los Medias Rojas el jueves pasado en el decisivo Juego 3 de la Serie del Comodín. En dicha presentación, el derecho tiró 8.0 ceros de cinco hits, 12 ponches y sin bases por bolas. De su parte, los Azulejos planificarán un juego del bullpen, sin un “opener” definido hasta ahora.