Todas las ligas importantes en los Estados Unidos están en plena marcha. Pero todos ha hablado solamente de una cosa esta semana. Sobre béisbol. están hablando de los Azulejos y Dodgers, de Shohei Ohtani y el dominicano Vladimir Guerrero Jr. Estamos hablando del Clásico de Otoño que ya se siente precisamente como eso: Clásico.

• Sección Especial: Serie Mundial 2025

Están hablando de las 18 entradas que jugaron el lunes hasta altas horas de la noche en Los Ángeles y de la madrugada en Toronto, una de las mejores Series Mundiales que se ha visto. Y ahora están hablando de cómo los Azulejos se recuperaron tras la derrota para ganar los últimos dos encuentros por un total de 12-3.

Tanto ha pasado durante la acción de octubre, y todavía podría pasar cuando llegue noviembre, en caso de que jueguen el sábado. Se han visto tantos momentos, se han creado tantos recuerdos y cómo marchan las cosas, en solo esta serie, seguramente habrá más. Pero lo hermoso de lo que hemos visto en la última semana es que está sucediendo para dos países en lugar de uno.

Piénsenlo bien: Una noche después del segundo partido de 18 episodios en la historia del Clásico de Otoño, una noche luego de que Ohtani otra vez se vio como el mejor pelotero en la historia, llegó Vlad Jr. para adueñarse del escenario — contra Ohtani — que pareció haber emparejado la serie, aunque el marcador apenas era 2-1 en ese momento.

¿Y el miércoles? Davis Schneider le dio al primer pitcheo que vio para enviarlo sobre la barda del bosque izquierdo y después llegó Vlad Jr. para volarse la cerca de manera consecutiva para poner al club canadiense rumbo a una victoria del título.

Otros dos swings de octubre. Un Juego 5 que fue otro recuerdo para los aficionados de los Azulejos. Parece que se han visto una docena de momentos así en esta serie, que ni siquiera ha terminado.

• Guerrero Jr. ha subido de nivel este mes. Ahora, Toronto acaricia el título

Sería bueno saber cuántos se quedaron despiertos en el Juego 3 y jamás olvidarán el drama de Clayton Kershaw, en lo que pudo haber sido la última presentación de su carrera, saliendo del bullpen con las bases llenas en el cierre del 12do capítulo.

Esto no se trata de los seguidores de Toronto deseando que Nathan Lukes hubiera dado el hit que probablemente le hubiera dado la victoria a su equipo. Se trata de la gente que ama el béisbol, y que deseaban que Kershaw de alguna manera saliera de ese aprieto, y lograrlo en el Dodger Stadium con tanto de por medio.

En el escenario de Hollywood, este fue un extraordinario momento de Hollywood, en un deporte que todavía monta momentos como estos mejor que cualquiera. Así que vimos a Kershaw lanzando otra curva típica del zurdo y Lukes dando una rodada lenta hacia Tommy Edman en la intermedia. Estaba Sandy Koufax, el mejor zurdo en la historia de los Dodgers, en las gradas viéndolo todo.

• Kershaw vivió un último momento como jugador en el terreno del Dodger Stadium

Esto fue después de los dos cuadrangulares de Ohtani, y antes de que los Azulejos comenzaran a otorgarle boletos para que resultara embasándose nueve veces, otro de los asombrosos números que ha fijado la superestrella. Esto fue antes de que Freddie Freeman diera otro jonrón de oro en extrainnings en la Serie Mundial, un año después de su decisivo grand slam contra los Yankees en extrainnings.

Tantos relevistas tuvieron momentos heroicos en el Juego 3, tantas jugadas defensivas. El gran tiro de Vlad Jr. al otro lado del diamante para retirar a su compatriota Teóscar Hernández en la tercera base — es parte de la historia de la Serie Mundial. Fue similar a uno que Edman realizo en el mismo duelo.

Y jamás en sus vidas verán una mejor jugada del corte que la que vimos con Teóscar, Edman y Will Smith, con este último haciendo el toque para retirar a Schneider en el plato. Si cualquier parte de la jugada se hubiera demorado un segundo más, Schneider hubiera anotado. Pero ese no fue el caso.

Todo eso acompaña la joya de juego completo de Yoshinobu Yamamoto, y la mejor salida que el novato Trey Yesavage ha tenido en su vida, dominando a Los Ángeles al ponchar a 12 en el Juego 5. Nos hizo recordar al joven Josh Beckett llegando al Bronx en el Juego 6 de la Serie Mundial para dominar a los Yankees de la misma manera.

• Entre Vlad Jr., Yesavage y el esfuerzo colectivo, Toronto acaricia el título

Ahora toda la acción vuelve a Toronto, donde vimos a Joe Carter dar un bambinazo de Oro en otro Juego 6 de la Serie Mundial, ese en 1993. Pero lo maravilloso del mejor Clásico de Otoño que hemos visto en un buen tiempo es que todavía queda más. Todavía queda más temporada de béisbol.