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¿Podría la Serie Mundial empezar con un jonrón? Las probabilidades son altas

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¿Podría la Serie Mundial empezar con un jonrón? Las probabilidades son altas

¿Podría la Serie Mundial comenzar con un jonrón?

Habrá mucho poder en el turno del primer bate la noche del viernes en el Rogers Centre, gracias a Shohei Ohtani y George Springer. El dúo se combinó para 87 jonrones en la temporada regular 2025. Según el Elias Sports Bureau, eso establecerá un nuevo récord de la mayor cantidad de cuadrangulares combinados en temporada regular por los primeros bates del Juego 1 de una Serie Mundial, superando los 74 vuelacercas conectados entre Kyle Schwarber y el venezolano José Altuve en el 2022.

  • Sección Especial: Postemporada 2025

Ohtani lideró a las Grandes Ligas con 12 vuelacercas abriendo las acciones este año, mientras que Springer –quien no se movió al primer turno hasta mediados de agosto– bateó tres. Pero no solo estamos hablando de cuadrangulares comenzando el juego. ¿Qué hay de los cuadrangulares ante el primer lanzamiento del juego? Ha sucedido antes en el Clásico Otoñal. En el 2017, el primer bate de los Dodgers, Chris Taylor, recibió a Dallas Keuchel con un bambinazo ante el primer envío en la parte baja de la primera entrada. Dos años antes, en el 2015, el campocorto de los Reales de Kansas City, el venezolano Alcides Escobar, emboscó el primer lanzamiento que vio de Matt Harvey y, con ayuda de la defensa de los Mets, terminó con un cuadrangular dentro del parque. Quizás Ohtani o Springer hagan una entrada similar.

Esta postemporada, ha habido dos jonrones contra el primer lanzamiento del encuentro, uno de Springer en el Juego 1 de la Serie de Campeonato de la Liga Americana, y el otro del venezolano Jackson Chourio en el Juego 2 de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional. (Para ser claros, estamos hablando tanto de la parte alta de la primera entrada como de la parte baja de la primera entrada aquí. Esencialmente, el primer lanzamiento realizado por un pitcher abridor). Eso está empatado con la mayor cantidad de jonrones de ese tipo en una sola postemporada en la era de seguimiento de lanzamientos (desde el 2008). Es una extensión de lo que vimos en la campaña regular: los 51 vuelacercas contra el primer lanzamiento de un encuentro en el 2025 también fueron la mayor cantidad en la era de seguimiento de pitcheos. En comparación, en el 2010, sólo hubo seis jonrones con esas características en toda la temporada.

El repunte gira en torno a una premisa básica: que el primer lanzamiento del juego es a menudo el mejor para batear. Esta es una idea que el escritor de béisbol Sam Miller discutió ampliamente en mayo en su Substack, Pebble Hunting (se requiere suscripción).

En 2010, los primeros bates hicieron swing al primer lanzamiento del juego el 12.1% de las veces. Quince años después, esa tasa se ha más que duplicado; la tasa de swing a dichos lanzamientos es del 28.2%. Ese es un cambio drástico, y, aun así, los bateadores podrían hacer swing a estos envíos con más frecuencia. Profundicemos.

Volvamos al 2010, con seis jonrones al primer pitcheo conectados por seis toleteros diferentes, desde Andrew McCutchen hasta Fred Lewis. Resulta que esos bateadores tenían razón. Esos seis jonrones se produjeron exclusivamente contra rectas, definidas aquí como cuatro costuras y sinkers. En el 2025, de los 53 jonrones al primer lanzamiento (incluida la Postemporada), 50 han sido contra rectas.

Eso es una consecuencia de la forma en que los abridores tratan el primer pitcheo del juego. Esta temporada, el 92.4% de estos lanzamientos fueron rectas. De hecho, los primeros bates —nuevamente, tanto en la parte alta como en la parte baja de la primera entrada— han visto una recta con el primer pitcheo en la primera entrada al menos el 90% de las veces cada año desde el 2009. Si los conteos de 3-0 — 88% de rectas en el 2025— se consideran el conteo de rectas por excelencia definitivo, esta es la situación de rectas definitiva.

Sigue siendo increíblemente difícil batear en las Grandes Ligas, especialmente en una temporada denominada apropiadamente el “año de la mezcla de lanzamientos”. Los repertorios continúan expandiéndose y el uso de las rectas continúa disminuyendo. Este año, se lanzaron rectas con menos frecuencia —47.4% de las veces— que cualquier otra temporada en la era del seguimiento de lanzamientos (desde 2008). Antes de comenzar la Serie Mundial, el uso de bolas rápidas en los playoffs es del 48.1%, la tasa más baja en una sola postemporada en ese mismo lapso.

Cuando es casi imposible saber qué viene, el primer bate puede tener una ventaja, debido a un pitcheo. Y estos son buenos lanzamientos para batear. No solo son rectas en la gran mayoría de las veces, sino que es probable que estén en la zona, porque el pitcher quiere adelantarse en la cuenta. En el 2025, la tasa de pitcheos en la zona de la liga fue del 50.7%. Pero el primer envío del juego está en la zona el 59.1% de las veces. Esta temporada, la liga tuvo una combinación de AVG/SLG de .368/.735 ante el primer lanzamiento de la primera entrada. Como referencia, Aaron Judge registró un AVG/SLG de .331/.688 en una de las mejores temporadas que hemos visto de un bateador derecho. Cuando los primeros bates hacen swing al primer pitcheo que ven, se convierten en una mejor versión del mejor bateador del juego.

Para recapitular: el primer pitcheo de la primera entrada es casi siempre una recta, incluso a medida que el uso de las mismas (cuatro costuras y sinkers) se desploma. Los primeros bates están atacando estos envíos más a menudo de lo que solían hacerlo, y cuando lo hacen, es probable que causen daño. Como resultado, hemos visto una andanada de jonrones contra el primer lanzamiento del juego.

Entonces, ¿qué podría significar eso para el viernes?

Comencemos con Ohtani, porque simplemente no hay otro lugar para empezar, no después de su actuación histórica en el Juego 4 de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional. Ohtani ha sido el primer bate en 159 de los 172 juegos de los Dodgers esta temporada (incluidos los playoffs). Su tasa de swing al primer pitcheo de la primera entrada es del 24.7%, que está por debajo del promedio de la liga (28.2%). Cuando hace swing al primer envío, su BA/SLG es de .353/1.000. Ha conectado tres jonrones. De las 17 pelotas que ha puesto en juego, todas menos cinco han sido batazos fuertes. Hace contacto atronador.

Eso no es sorprendente, porque Ohtani bateó la pelota más fuerte que nadie esta temporada, excepto Kyle Schwarber, y, como hemos señalado, el primer lanzamiento del juego tiende a ser excelente para hacer swing. En la temporada regular, Ohtani vio menos rectas que um bateador promedio, y por una buena razón. Destroza las bolas rápidas. Su slugging esperado de .719 ante cuatro costuras y sinkers fue mejor que el de cualquier toletero que no fuera Schwarber, Judge y Springer. Pero, de los 159 pitcheos que Ohtani ha visto para comenzar las acciones, 136 han sido rectas. Es una ventaja innegable.

En la postemporada, Ohtani ha hecho swing a tres lanzamientos en cuenta de 0-0 en la primera entrada, todos contra zurdos, y dos veces contra el dominicano Cristopher Sánchez, quien ponchó a Ohtani cuatro veces en seis turnos. Esto tenía sentido, ya que Ohtani tuvo problemas contra el as de los Filis. Al hacer swing de inmediato, podía garantizarse virtualmente una recta, evitando el cambio característico de Sánchez. Efectivamente, Sánchez le lanzó a Ohtani un sinker como primer lanzamiento para comenzar los Juegos 1 y 4 de la SDLN. Ambas veces, fue el mejor pitcheo que Ohtani tuvo para batear en el turno.

Luego está Springer. Uno de los bateadores de poder más prolíficos en la historia de los playoffs, el jugador de 36 años ya grabó su nombre en los registros de la franquicia con su jonrón épico en el Juego 7 de la SCL. Incluyendo la temporada regular, la tasa de swing de Springer al primer lanzamiento del juego es del 28%, justo en el promedio de la liga. Esa tasa se ha mantenido en octubre: ha hecho swing a tres de los 11 primeros pitcheos que ha recibido en la primera entrada. De esos 11, nueve fueron rectas, incluido el que mandó por encima del bullpen de Seattle en el jardín derecho ante Bryce Miller para comenzar la SCLA. Eso representó la única carrera que los Azulejos anotaron contra Miller, que estaba lanzando con solo tres días de descanso.

Los pitchers son la otra parte de la ecuación aquí. ¿Comenzarán la Serie Mundial lanzando una recta contra dos de los mejores bateadores de bolas rápidas del béisbol?

Tomemos el cuarteto de brazos que forman la rotación de L.A. Aparte de un estornudo de Yoshinobu Yamamoto en el Juego 3 de la SDLN, han sido francamente imbatibles. Sin embargo, en el caso de un lanzamiento, han sido algo predecibles: en 10 juegos de postemporada, los pitchers abridores de los Dodgers han abierto el juego con siete rectas.

Blake Snell, el abridor del Juego 1 por los Dodgers, ha hecho 235 aperturas en su carrera, incluida la postemporada. Su primer lanzamiento del juego ha sido una recta de cuatro costuras 224 veces. La tasa de pitcheos en la zona de Snell con esos lanzamientos es del 58%, muy por encima de su tasa general de envíos en la zona del 43.7%, después de haber luchado durante mucho tiempo con su control. ¿Por qué Springer dejaría pasar una recta en strike cuando la alternativa es esperar un devastador cambio?

¿Y los Azulejos realmente van a lanzarle una recta para empezar la Serie Mundial a Ohtani? Aún no han nombrado un abridor para el Juego 1, pero podría ser Kevin Gausman, quien ha asumido el rol a lo largo de la postemporada. Esta temporada, Gausman ha comenzado todas menos una de sus 35 aperturas con una bola rápida de costuras; 19 de ellas han estado en la zona de strike. La excepción fue el 26 de junio, cuando Gausman engañó a Steven Kwan con un slider comenzando el desafío. Es la única vez que no ha lanzado una recta de cuatro costuras para comenzar un juego en los últimos dos años. Es habitual. Sin embargo, esta temporada, de los nueve swings contra estos lanzamientos, sólo el boricua Francisco Lindor se embasó, gracias a un doble como primer bate el 4 de abril. Quizás Ohtani esté preparado para cambiar eso.

Si los Azulejos eligen al novato Trey Yesavage como su abridor del Juego 1, bueno, ha comenzado cada una de sus seis aperturas en las Mayores con un pitcheo rápido. Los bateadores no han enfrentado su splitter letal hasta más tarde en la cuenta. El dominicano Julio Rodríguez es el único jugador que ha hecho swing al primer lanzamiento del juego de Yesavage.

Nunca hay una buena razón para perderse el primer pitcheo de la Serie Mundial. Y con el aumento de los jonrones ante el primer lanzamiento, hay aún más incentivos para estar frente a un televisor a las 8 p.m. ET la noche del viernes. Porque hay muchas posibilidades de que Ohtani o Springer estén listos para sacar la pelota del parque.

Fuente: MLB.com

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