Cuando se trata del béisbol de postemporada, los récords de temporada regular y las siembras en los playoffs parecen no importar. Cualquiera puede ganar la Serie Mundial y nunca hay garantías.

Desde el año 2000, dieciséis equipos han ganado el Clásico de Otoño, y ningún club ha conseguido campeonatos consecutivos en ese trecho.

Al iniciar la postemporada del 2025, aquí presentamos por qué cada equipo clasificado puede alzarse con el título.

TIGRES

Es cierto que las últimas semanas no han sido las mejores para Detroit, pero la historia demuestra que el impulso en la recta final de la temporada regular importa poco en octubre. Eso incluye la historia de los propios Tigres: el equipo del 2006 perdió el título de la Central de la Liga Americana tras ser barridos en el último fin de semana de la campaña, y luego encendió motores en la postemporada para llegar a la Serie Mundial. La escuadra del 2025, que dejó escapar una ventaja de 14 juegos en la división, es esencialmente el mismo que llegó al receso por el Juego de Estrellas con el mejor récord de las Mayores. Y lo más importante: Tarik Skubal sigue siendo una fuerza dominante en un juego de playoffs, y los Tigres practican un estilo frenético en su ofensiva y corrido de bases que resulta difícil de contrarrestar cuando están en su mejor versión. — Jason Beck

AZULEJOS

Ningún equipo en Grandes Ligas contó con tantos héroes distintos a lo largo de la temporada como los Azulejos del 2025. No siempre tienen que ser el dominicano Vladimir Guerrero Jr. o Bo Bichette quienes te derroten, y todos sabemos que octubre puede dar paso a figuras inesperadas. Esa es la mayor fortaleza de Toronto: una de las nóminas más profundas del circuito, capaz de atacar de forma creativa, especialmente en los tramos finales de los juegos cuando pueden aprovechar los enfrentamientos favorables. Cuando esta alineación está encendida, los Azulejos pueden combinar su ofensiva con una defensa élite y un cuerpo monticular confiable. Mientras algunos equipos se imponen a punta de poder, los Azulejos pueden ganar juegos de mil formas diferentes, y quizás necesiten usar cada una de ellas en octubre. — Keegan Matheson

YANKEES

No ha sido un camino fácil para estos Yankees, ni mucho menos. Tras un gran comienzo, el equipo se desplomó durante junio y julio, generando dudas sobre si los campeones defensores de la Liga Americana lograrían siquiera volver a clasificar. Pero reaccionaron en el momento justo, liderados por un talento generacional como Aaron Judge, principal candidato al JMV del Joven Circuito, quien parece decidido a cambiar su narrativa en la postemporada. Max Fried y Carlos Rodón ofrecen dos ases capaces de dominar cualquier serie. Además, hicieron movimientos inteligentes en la Fecha Límite de Cambios, añadiendo piezas con atletismo como el cerrador David Bednar, el utility panameño José Caballero y el antesalista Ryan McMahon. — Bryan Hoch

MEDIAS ROJAS

Con Garrett Crochet y el cubano Aroldis Chapman, los Medias Rojas tienen, posiblemente, la mejor combinación de abridor y cerrador entre todos los equipos en la postemporada. Ambos zurdos de poder han dominado durante toda la campaña, dándole a Boston la confianza de que pueden seguir haciéndolo en octubre. Crochet es un as que puede marcar la pauta al inicio de una serie, salvar al equipo en el medio o sellar el pase a la siguiente ronda. Chapman, a sus 37 años, finalmente ha conseguido el control de sus pitcheos sin perder su recta de tres dígitos ni su slider letal. — Ian Browne

MARINEROS

Se podría argumentar que su plantilla posterior a la Fecha Límite de Cambios es la más completa de la Gran Carpa, y también la más imponente si logran alcanzar su máximo nivel. Ambas cosas se han visto en septiembre, cuando los Marineros ganaron 15 de 16 juegos para superar a los Astros y conquistar el Oeste de la Liga Americana. Cal Raleigh ha sido su JMV en una temporada histórica, pero el repunte del quisqueyano Julio Rodríguez en la segunda mitad fue igual de clave. Su verdadero catalizador ha sido Josh Naylor, adquirido en el cierre de cambios. Aunque su rotación no ha estado entre las mejores como en años anteriores, si este grupo –que incluye a cuatro llamados consecutivos al Juego de Estrellas– está saludable y en forma, puede ser el rival más peligroso de octubre. — Daniel Kramer

GUARDIANES

Los Guardianes cuentan con calidad y profundidad en su rotación, y ese cuerpo de abridores podría guiarlos a su primer título desde 1948. Una rotación de seis brazos compuesta por Tanner Bibee, Gavin Williams, Slade Cecconi, Logan Allen, Parker Messick y Joey Cantillo ha estado encendida durante el último mes, permitiendo que Cleveland regresara de la lona para asegurar un pase histórico a la postemporada. Los Guardianes terminaron septiembre con marca de 20-7, y su rotación dejó efectividad de 2.60. Del 5 al 24 de septiembre, registraron una efectividad de 1.35 y permitieron dos carreras o menos en 19 partidos consecutivos, con marca de 17-2 en ese tramo, borrando una ventaja de 11 juegos de los Tigres. — Tim Stebbins

CERCEVEROS

No tienen mucho poder ni grandes nombres –más allá del renacido Christian Yelich–, pero los Cerveceros lograron el mejor récord de la temporada regular con uno de los equipos más balanceados del béisbol. El 24 de mayo estaban con marca de 25-28, y luego despegaron con rachas ganadoras de ocho, once y un récord de franquicia de catorce juegos, acumulando 53 victorias en sus siguientes 69 partidos. Así, terminaron con el mejor diferencial de carreras, el mejor corrido de bases (según Statcast), la tercera mejor ofensiva en carreras por juego y la cuarta mejor defensa por valor de carreras de fildeo. — Adam McCalvy

FILIS

Los Filis tienen una de las nóminas más completas del béisbol, incluso sin su as Zack Wheeler, quien se pierde el resto del año por un coágulo cerca del hombro derecho. Aun así, cuentan con el dominicano Cristopher Sánchez, y los venezolanos Ranger Suárez y Jesús Luzardo en la rotación. El quisqueyano Jhoan Durán se ha convertido en una pieza clave como cerrador. Filadelfia tiene una ofensiva Top 10 liderada por Kyle Schwarber, Bryce Harper y Trea Turner. El mánager Rob Thomson ha implementado con éxito sistemas de pelotones en el jardín izquierdo, el derecho y la segunda base, fortaleciendo la parte baja del lineup. — Todd Zolecki

DODGERS

Los Dodgers no sólo tienen a uno de los mejores bateadores del béisbol en Shohei Ohtani al tope del lineup, sino que también forma parte de lo que podría ser su mayor fortaleza: la rotación. El año pasado ganaron la Serie Mundial pese a las lesiones en su pitcheo abridor. Este año, la rotación proyectada con Ohtani, Blake Snell, Yoshinobu Yamamoto y Tyler Glasnow podría ser la clave para defender el título. Este es un equipo con 13 postemporadas consecutivas y dos títulos en los últimos cinco años. Ningún club ha repetido campeonato desde los Yankees entre 1998 y 2000, pero estos Dodgers fueron construidos para ganar. — Sonja Chen

CACHORROS

La base de estos Cachorros es la prevención de carreras. Los del Norte de Chicago cuentan con ganadores del Guante de Oro en segunda (Nico Hoerner), campocorto (Dansby Swanson), jardín izquierdo (Ian Happ) y jardín derecho (Kyle Tucker), además de tener al que podría ser el mejor defensor del juego en el central (Pete Crow-Armstrong). Esa defensa potencia a un cuerpo de lanzadores que ataca la zona y limita los boletos. La ofensiva mezcla poder, velocidad y contacto, lo que le permite encontrar distintas formas de producir rayitas. Es una nómina profunda y versátil, que depende más del colectivo que de una o dos estrellas. En un escenario donde cualquiera puede ser el héroe, eso convierte a los Cachorros en un equipo peligroso. — Jordan Bastian

PADRES

¿Quieres vencer a los Padres? Será mejor que no vayas perdiendo después del quinto inning. San Diego armó uno de los mejores cuerpos de relevistas de Grandes Ligas y lo reforzó en la Fecha Límite al adquirir a Mason Miller, quien ha estado intraficable desde su llegada. Bullpens como este suelen brillar en octubre, cuando abundan los días libres. El estelar cerrador venezolano Robert Suárez se encargará del último inning. Miller tomará los momentos de máxima presión antes del noveno. Y el cubano Adrián Morejón se encargará del tramo más difícil frente a zurdos, sin olvidar las contribuciones clave de Jeremiah Estrada, David Morgan y el dominicano Wandy Peralta. Si la ofensiva de los Padres –que también se reforzó en julio– consigue tomar la delantera temprano, el juego podría estar sentenciado. — AJ Cassavell

ROJOS

El pitcheo abridor. Cincinnati contó con una rotación profunda y efectiva a lo largo del año, con distintos lanzadores brillando en diferentes momentos. El zurdo Andrew Abbott emergió como un abridor con nivel de as y fue llamado por primera vez al Juego de Estrellas tras una primera mitad dominante. Otro zurdo, Nick Lodolo, se mantuvo mayormente saludable y logró marcas personales en aperturas, innings y ponches. Brady Singer, adquirido en el receso de temporada, fue quizás el más consistente, pero también el más efectivo en la recta final. Y no hay que olvidar a Hunter Greene, abridor del Día Inaugural que se perdió más de dos meses por una lesión en la ingle, pero que antes y después de esa ausencia mostró su poderosa recta de tres dígitos. En conjunto, es una rotación que ningún rival querrá enfrentar en octubre. — Mark Sheldon