MILWAUKEE — Los resultados de la prueba de resonancia magnética en la corva derecha de Jackson Chourio tras la victoria de los Cerveceros en el Juego 1 de la Serie Divisional sobre los Cachorros la tarde del sábado fueron no concluyentes, dijo el manager Pat Murphy, y la disponibilidad del venezolano para el Juego 2 la noche del lunes probablemente seguirá siendo un misterio hasta justo antes del primer pitcheo pautado para las 9:08 p.m. ET.
Chourio corrió las bases a un ritmo ligero, pero no tomó práctica de bateo, ni fildeó elevados durante la práctica del domingo, y el hecho de que los Cerveceros no ofrecieran un informe más definitivo sobre su estado no debería sorprender a nadie. Esto se debe tanto al deseo de ambos equipos de ocultar información a sus rivales más familiares, como a la naturaleza de las lesiones en el tendón de la corva.
¿Qué busca un coach en una sesión de carreras como la que hizo Chourio?
“La adrenalina no se acerca en nada a la que hay en un juego, así que se trata más de la fluidez de sus pasos, de lo cómodo que se ve, de si hay alguna duda al correr”, explicó el dominicano Julio Borbón, coach de primera base de los Cerveceros y gurú del corrido de bases en Milwaukee. “Creo que a veces hay cierta duda cuando un jugador viene de algo que ha tenido antes. Me fijo más en eso que en qué tan rápido está corriendo”.
“Estamos tratando de evaluar algunas de las cosas que él está describiendo. Según tengo entendido, no es nada significativo, pero probablemente sea una combinación de lo que está en su cabeza. Yo pasé por eso y sé cómo se siente”.
Borbón jugó para los Rangers, Cachorros y Orioles durante una carrera de 12 años, y el hecho de que Chourio pudiera intentar correr apenas 24 horas después fue alentador. Chourio se perdió la mayor parte de agosto con una distensión en la corva derecha después de sufrir originalmente la lesión al dar un triple el 29 de julio contra los Cachorros en el American Family Field.
Chourio regresó el 30 de agosto después de completar una asignación de rehabilitación en las ligas menores, y aún necesitaba tiempo para recuperar su velocidad máxima en las bases y en los jardines. Ese nivel pareció regresar al final de la temporada regular, cuando Chourio se robó una base en tres de los últimos cuatro juegos de los Cerveceros para convertirse en el jugador más joven en registrar múltiples temporadas de 20 o más jonrones y 20 o más robos de base.
“Definitivamente, creo que eso influye”, señaló Murphy. “Nunca se sabe cuánto. Jackson es un muchacho súper fuerte y un gran competidor. Pero cuando nunca te has lesionado antes y tienes veintitantos años, y de repente tienes una lesión importante y te pierdes un mes, luego regresas y te preguntas, ‘¿Estoy realmente sano al 100%?’ y la confianza en la gente que te rodea y todo ese tipo de cosas, creo que eso entra en juego”.
“Luego lo sientes de nuevo: ‘Oh, Dios. Creo que probablemente está ahí’. Pero no sé cómo podríamos medir eso. Aunque pongamos al equipo de analítica a trabajar en ello. Ellos miden todo lo demás”.
Borbon sabe lo que se siente.
“Yo he tenido ese tipo de lesiones, y no habría estado corriendo en absoluto”, aseguró Borbon. “Sé que este muchacho es especial y único en muchos sentidos, así que tal vez pueda hacer algunas cosas que la mayoría de la gente no haría. Estoy bastante seguro de que la velocidad que mostró allí —ya sea al 60, 70 u 80 por ciento— es mejor que la de muchos. Ahí es donde está la línea fina: ¿Podemos presionarlo?”.
Esa decisión recae en Chourio, el staff médico de los Cerveceros, Murphy y el gerente Matt Arnold antes del Juego 2, cuando Milwaukee se enfrentará a otro zurdo de los Cachorros, Shota Imanaga. Chourio bateó como primer bate contra el zurdo abridor del Juego 1 de Chicago, Matthew Boyd, y tuvo un impacto inmediato, yéndose de 3-3 con tres carreras impulsadas para el segundo inning, y abandonando el juego después de conectar un hit dentro del cuadro productor de una carrera en el segundo episodio.
Isaac Collins tomó el lugar de Chourio y se encargaría de las tareas en el jardín izquierdo si Chourio se ausenta, dijo Murphy.
En el panorama general, Murphy dijo que la buena noticia es que la resonancia magnética no reveló una lesión evidente. Y Borbón señaló que el calendario de esta serie no podría ser mejor; el Juego 1 fue el primero de los cuatro juegos de la Serie Divisional del sábado, y es el último Juego 2 en el calendario de la noche del lunes. Luego hay otro día libre el martes mientras la serie se traslada a Chicago, lo que podría ser otro factor en lo que decidan hacer los Cerveceros.
“Definitivamente, necesitamos a un Chourio sano, como todos sabemos”, terminó Borbón. “Esta será una decisión importante en las próximas 24 horas. En verdad es una difícil. Es un vacío muy, muy grande que llenar si tenemos que ir en una dirección diferente”.
Fuente: MLB.com