NUEVA YORK — El mánager de los Mets, el venezolano Carlos Mendoza, ni siquiera pudo dar la noticia sin reírse.
“Está en la alineación hoy en Triple-A, como bateador designado”, dijo Mendoza el sábado sobre el receptor Francisco Álvarez, cuya tolerancia al dolor desafía las convenciones humanas normales.
Hace apenas tres días, el venezolano, que se está rehabilitando de un esguince en el ligamento del pulgar derecho, se fracturó el meñique izquierdo al recibir un pelotazo. A la tarde siguiente, los médicos le dieron el visto bueno para volver a batear usando una férula en el dedo.
“Y, como era de esperarse, diez minutos después”, contó Mendoza, “ya estaba en las jaulas bateando con todo”.
Dos días después, Álvarez regresó al equipo de Syracuse, listo para retomar su camino de vuelta a las Grandes Ligas. Ambas lesiones dependen de su tolerancia al dolor; Álvarez se someterá a una cirugía en el pulgar derecho al final de la temporada. La fractura en el meñique debería sanar por sí sola y, hasta ahora, no ha afectado su fuerza de agarre.
“Tiene un ligamento dañado en la mano derecha, el meñique fracturado en la izquierda, y está mandando pelotas al segundo piso”, dijo Mendoza sobre la primera práctica de bateo del receptor con el dedo fracturado. “No hay ninguna duda en su swing. No está protegiendo nada. Está soltando todo.”
En cuanto a la defensa, Álvarez estuvo detrás del plato hace poco en una sesión de bullpen sin efectos negativos. Podría volver a fungir como receptor en Syracuse tan pronto como este domingo.
Respecto a su eventual regreso a las Grandes Ligas, eso dependerá de su rendimiento durante la asignación de rehabilitación. Jugar con dolor es una cosa; rendir con dolor es otra. Los directivos de los Mets buscarán resultados en el campo antes de, idealmente, reincorporarlo a las Mayores cuando se amplíen los rosters en septiembre.
En general, esta temporada Álvarez batea para .265/.349/.438 con siete jonrones en 56 juegos. Tras regresar de una estancia en las Menores por rendimiento a fines de julio, Álvarez bateó .323/.408/.645 con cuatro cuadrangulares en 21 partidos antes de ingresar a la lista de lesionados.
Se ha perdido tiempo en las últimas dos campañas debido a cuatro lesiones distintas en las manos, incluyendo esguinces y desgarros del ligamento colateral cubital (UCL) en ambos pulgares, una fractura en el hueso ganchoso de la mano izquierda y una fractura en el meñique izquierdo. La próxima cirugía de Álvarez será su tercera en menos de dos años.
Fuente: MLB.com